Fernando Pessoa (1888-1935)
“Cuando venga la primavera,Si yo estuviese muerto,las flores florecerán del mismo modo,y lo árboles no serán menos verdes que en la Primavera pasada.
La realidad no me necesita.”
La realidad no necesita a nadie.Un tango dice, “sus ojos se cerraron y el mundo sigue andando”.Borges comienza su relato “El Aleph” refiriéndose a la muerte de Beatriz Viterbo,y comenta que las carteleras publicitarias de la Estación Constitución habían renovado sus avisos comerciales.La existencia sigue adelante y no se preocupa por los que quedan en el camino.
“Una vez amé, pensé que me amarían,pero no fui amado.
Pero no fui amado por la única gran razón:porque no tenía que ser.
Me consolé volviendo al sol y a la lluvia,y sentándome otra vez a la puerta de casa.
Los campos, al fin, no son tan verdes para los que son amados como para los que no lo son.
Sentir es estar distraído.”
"Quien lee deja de vivir.Haced ahora por hacerlo.Dejad de vivir y leed. ¿Que es la vida?"
"Conformarse es someterse, y vencer es conformarse, ser vencido. Vence solo quien nunca lo consigue, solo es fuerte quien se desanima siempre."
Todo suena a frialdad emocional, ajena a Fernando Pessoa.
No olvidemos que el poeta es un fingidor.
Conociendo la vida del poeta sabemos que para él los sentimientos eran peligrosos, como un puñal hostil y silencioso, manifestando, a través de un heterónimo, que solo podía sentir a traves del tango.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario